Buenas, qué alegría verse enrededados en la red! horizonte virtual que va vinculando los haceres y los saberes y que en nuestro caso, va conservando y cultivando las relaciones cara a cara que hemos ido construyendo en el Espacio. De memoria, que tenemos harta quiénes queremos construir otras economías, Mercosur Solidario nace como inquietud precisamente en Uruguay, en Canelones, en Atlántida...con Pablo, con Gilda, con Gerardo, y con tantos/as que nombrar...
Para esa memoria y en homenaje a esos lares, la leyenda de la diosa, narrada por el uruguayo de toda américa latina (lo de uruguayo del mundo lo dice el sup, en sus Ansias del Alba, aunque la verdad, no recuerdo si en referencia a Galeano o a Benedetti).
Les va la leyenda (Patas arriba, de Galeano)
"La noche de Iemanyá, toda la costa es una fiesta. Bahía, Río de Janeiro, Montevideo y otras orillas celebran a la diosa de la mar. La multitud enciende en la arena un lucerío de velas, y arroja a las aguas un jardín de flores blancas y también perfumes, collares, tortas, caramelos y otras coqueterías y golosinas que a ella tanto le gustas. Entonces los creyentes piden algún deseo:
el mapa del tesoro escondido,
la llave del amor prohibido,
el regreso de los perdidos,
la resurrección de los queridos.
Mientras los creyentes piden, sus deseos se realizan.
Quizás el milagro no dure más que las palabras que lo nombran, pero mientras ocurre esa fugaz conquista de lo imposible, los creyentes son luminosos y brillan en la noche.
Cuando el oleaje se lleva las ofrendas, ellos retroceden, de cara al horizonte, por no dar la espalda a la diosa. Y, a paso muy lento, regresan a la ciudad."
Esto ahorita es mío, regresan a la ciudad bajo el influjo del poder del lenguaje, sonriendo, porque todo lenguaje es acción...
Para esa memoria y en homenaje a esos lares, la leyenda de la diosa, narrada por el uruguayo de toda américa latina (lo de uruguayo del mundo lo dice el sup, en sus Ansias del Alba, aunque la verdad, no recuerdo si en referencia a Galeano o a Benedetti).
Les va la leyenda (Patas arriba, de Galeano)
"La noche de Iemanyá, toda la costa es una fiesta. Bahía, Río de Janeiro, Montevideo y otras orillas celebran a la diosa de la mar. La multitud enciende en la arena un lucerío de velas, y arroja a las aguas un jardín de flores blancas y también perfumes, collares, tortas, caramelos y otras coqueterías y golosinas que a ella tanto le gustas. Entonces los creyentes piden algún deseo:
el mapa del tesoro escondido,
la llave del amor prohibido,
el regreso de los perdidos,
la resurrección de los queridos.
Mientras los creyentes piden, sus deseos se realizan.
Quizás el milagro no dure más que las palabras que lo nombran, pero mientras ocurre esa fugaz conquista de lo imposible, los creyentes son luminosos y brillan en la noche.
Cuando el oleaje se lleva las ofrendas, ellos retroceden, de cara al horizonte, por no dar la espalda a la diosa. Y, a paso muy lento, regresan a la ciudad."
Esto ahorita es mío, regresan a la ciudad bajo el influjo del poder del lenguaje, sonriendo, porque todo lenguaje es acción...
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